Desde que hiciera pública su homosexualidad hace dos años, Ricky Martin se ha posicionado como una de las celebridades más activas en la defensa de los derechos de la comunidad gay, por lo que no se ha quedado callado ante las polémicas declaraciones de un pastor baptista, el reverendo Charles Worley, que proponía encerrar "a todas las lesbianas y gays en un campo cercado con vallas eléctricas".