Lo habían recogido diversos medios LGTB, pero hasta The New York Times da crédito a la hipótesis. El apoyo por parte de la comunidad LGTB a Barack Obama en las pasadas elecciones presidenciales, que triplicó al recibido por Romney, habría sido determinante para decidir el resultado.
Según mostraron las encuestas a pie de urna (que en Estados Unidos preguntan no solo por el candidato al que se ha votado, sino por otros parámetros sociales) Barack Obama obtuvo el apoyo del 76% de los votantes que se identifican como LGTB, frente al 22% de apoyo obtenido por Romney. Entre los votantes que se identifican como heterosexuales el voto se dividió a partes iguales (49% para cada uno).